Durante la grabación de su más reciente álbum, la cantante cubanoamericana Gloria Estefan reflexionó sobre el grave accidente que vivió hace 35 años y cómo ese evento marcó un antes y un después en su vida personal y profesional. En una entrevista con la revista People, la intérprete aseguró que, a pesar de la dureza del momento, no cambiaría nada de lo vivido.
El 20 de marzo de 1990, mientras se encontraba de gira, un camión semirremolque impactó contra el autobús en el que viajaba por una autopista nevada en Pensilvania. Gloria Estefan, que dormía al momento del accidente, sufrió una fractura en la columna vertebral y fue sometida a una compleja cirugía. A sus 67 años, recuerda el episodio como un punto de inflexión en su manera de ver la vida y su carrera artística.
“Quizá esta es la razón por la que he pasado por esto; tal vez puedo ser un ejemplo para las personas de cómo tomar el control de nuestras vidas y superar los obstáculos”, expresó la artista. Afirmó que, si bien su esencia no cambió, sí lo hizo su manera de conectar con la música, con su público y con su propia voz. “El disfrute, la apreciación y la gratitud se reflejaron en mi voz”, señaló.
Durante la conversación también compartió el consejo que se daría a sí misma en su juventud: vivir el momento y no dejarse arrastrar por las exigencias del perfeccionismo. “Solo está presente y disfruta la música... Y no te preocupes por ser perfecta”, agregó.
Estefan presentó recientemente su álbum titulado Raíces, lanzado el 29 de mayo. La producción, compuesta en gran parte por su esposo Emilio Estefan, nació en paralelo a la preparación del musical Basura y representa una historia de amor y conexión con sus orígenes. “Nuestra cultura es importante de celebrar... Nos hace quienes somos”, afirmó la artista.
Con más de cinco décadas de trayectoria, Gloria Estefan continúa siendo una figura emblemática de la música latina. A través de Raíces, busca rendir homenaje a su identidad y a las personas que la han acompañado en su camino, en un disco cargado de amor, memoria y gratitud.
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