La situación en el Medio Oriente se ha intensificado tras los recientes intercambios de cohetes entre Israel y Hezbollah. El 1 de octubre, Irán lanzó ataques directos con misiles contra Israel, mientras que este último comenzó una invasión terrestre en Líbano. Este desarrollo eleva el riesgo de una guerra regional a gran escala, especialmente considerando que Israel podría responder con ataques aéreos a las instalaciones nucleares de Irán, un objetivo que ha estado en la agenda del país durante años.
El ataque iraní, que implicó el lanzamiento de aproximadamente 200 misiles balísticos, se produjo en un contexto de advertencias de Estados Unidos e Israel. Aunque la mayoría de los misiles fueron interceptados y no se reportaron muertes en Israel, el ataque ha sido interpretado como un llamado a una respuesta más contundente por parte de Israel. Los líderes israelíes creen que la debilidad de las fuerzas aliadas de Irán brinda una oportunidad para transformar el equilibrio de poder en la región.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han comenzado incursiones en el sur de Líbano para destruir lanzamisiles de Hezbollah, aunque aún no se han convocado a reservistas para una invasión a gran escala. No obstante, las advertencias a los residentes de más de 20 pueblos para que evacuen indican que Israel está considerando una operación más ambiciosa.
El ambiente se complica con la posibilidad de enfrentamientos intensos, dado que Hezbollah ha estado involucrado en la guerra civil siria y tiene un conocimiento profundo del terreno montañoso. Además, las fuerzas israelíes están mejor preparadas gracias a su experiencia reciente en Gaza.
Mientras tanto, el apoyo de Estados Unidos a las acciones de Israel sigue vigente, aunque hay preocupación sobre la expansión de la misión en Líbano. Muchos en Israel, incluso algunos exlíderes militares, advierten sobre los riesgos de una mayor implicación en Líbano y la necesidad de establecer objetivos claros en este conflicto. La escalada de tensiones podría tener graves implicaciones no solo para Israel, sino para toda la región.
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