El secretario de Estado, Mike Pompeo, pidió a su vez a los países miembros de la agrupación que reconsideren sus acuerdos con empresas chinas sancionadas por el país norteamericano por sus actividades en el área, que incluye la construcción de islas artificiales en las aguas disputadas
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, urgió el jueves a los países del sudeste asiático que no se dejen “amedrentar” por los avances del régimen Chino sobre las disputadas aguas del Mar del Sur.
Pompeo habló con sus homólogos de la Asociación de Países del Sureste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés) en su cumbre anual, celebrada de manera virtual debido a la pandemia del nuevo coronavirus. Cuatro de los estados miembros -
Filipinas, Vietnam, Malasia y Brunei- están inmersos en un antiguo conflicto territorial con China y Taiwán sobre la transitada región, que Beijing reclama casi en su totalidad. A su vez, Pompeo les pidió a las naciones que reconsideren sus acuerdos con empresas chinas sancionadas por Estados Unidos por sus actividades en las aguas disputadas, que incluyen la construcción de islas artificiales. Según indicó Pompeo, Beijing utiliza las construcciones para “acosar” a otros países con reclamos de soberanía sobre la zona.
Estados Unidos no tiene reclamaciones propias sobre el Mar de la China Meridional, pero el gobierno de Trump impuso recientemente sanciones sobre las autoridades chinas responsables del despliegue militar en la zona.
En concreto, las medidas -primeras de esta naturaleza referidas al conflicto- alcanzan a 24 empresas y ejecutivos del gigante asiático, fundamentadas en la violación de normas internacionales en la zona geográfica.
Estas acciones incluyen aeródromos y puestos de radares y misiles en islas construidas sobre arrecifes de coral, lo que plantea el temor a que China pueda interferir con la libertad de navegación en aguas internacionales. Las 24 empresas fueron incluidas en la “Lista de entidades” del Departamento de Comercio, lo que le permite bloquear las exportaciones de bienes y materiales estadounidenses a ellas.
“No sólo hablen, actúen”, dijo Pompeo a los diplomáticos del bloque de 10 naciones, sin entrar en detalles. Una vocera del Departamento de Estado dijo que Pompeo había hecho presión hacia una resolución pacífica de las disputas.
“Reconsideren los acuerdos de negocios con las mismas empresas estatales que acosan a los estados costeros de la ASEAN en el Mar de la China Meridional”, agregó. “No dejen que el Partido Comunista Chino nos pase por encima a nosotros y a nuestra gente. Deben tener confianza, y los estadounidenses estarán allí en amistad para ayudarles”, expresó.
China no respeta los valores democráticos ni los principios de soberanía, calidad e integridad territorial consagradas en la carta de la ASEAN, dijo Pompeo. Y resaltó las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump.
Estados Unidos ha desplegado buques militares y cazas para lo que describe como patrullas y vuelos en defensa de la libertad de navegación.
China no reaccionó inmediatamente a las declaraciones. El ministro de Exteriores del gigante asiático, Wang Yi, participó en las reuniones de la ASEAN y se reunió por separado con los ministros del grupo el miércoles.
China ha insistido en que tiene derecho a salvaguardar sus intereses nacionales y acusa a Washington de interferir en asuntos regionales. Poco después de que se impusieran las sanciones, China realizó un lanzamiento de misiles en la región, algo que Estados Unidos calificó de “desestabilizante”.
El ministro vietnamita de Exteriores, Pham Binh Minh, cuyo país organiza las reuniones de la ASEAN este año, señaló que “la relación entre la ASEAN y Estados Unidos ha supuesto beneficio mutuo para ambas partes”.
“El papel de Estados Unidos y su contribución a mantener la paz, la estabilidad y la seguridad en la región son bien recibidas”, dijo.
La ASEAN, fundada en 1967, ha tenido problemas para mantenerse al margen de la creciente rivalidad entre Washington y Beijing. A menudo ha insistido en su “centralidad” y su liderazgo regional, aunque algunos críticos acusan al grupo de influenciable ante las potencias mundiales.
La gestión de la ASEAN “puede resultar en desastre o en un nuevo amanecer de paz y estabilidad para nuestra región”, dijo el martes a sus colegas el ministro malasio de Exteriores, Hishammuddin Hussein.
“El desafío aquí es liderazgo, ¿lideramos o seguimos?”, preguntó. “No se equivoquen, el sureste asiático pretende seguir siendo el dueño de su destino”. Con información de AP
0 Comentarios